ETAPA 5: CÁCERES-MÉRIDA

De cómo el hecho de ir en contra de la señalización provoca despistes, fueras de pista, desencuentros y kilómetros de más.

Salimos de Cáceres por una vía paralela a la carretera nacional 630. A la altura de Valdesalor, perdemos la pista y continuamos un tramo por unos cortijos. Al darnos cuenta del error, y reagruparnos, preguntamos en la única casa de la zona el camino correcto y nos lo indica muy claramente.

Retornamos a la senda y poco más adelante circulamos por otro andadero, bastante bien preparado, paralelo a la carretera.

A la altura de Aldea del Cano decidimos avituallarnos en la gasolinera y almorzar. Apenas hemos desayunado un café en el apartamento y nos queda un largo periplo sin atravesar localidades. Un bocadillo y una coca cola harán el apaño hasta llegar a Mérida.

En Casas de Don Antonio abandonamos el andadero de la carretera y nos internamos en el monte. La senda va ascendiendo poco a poco, inapreciablemente, entre retamas y otros arbustos en flor. La fragancia de las flores invade el ambiente.

La señalización se esconde entre estos matorrales y acabamos por perdernos varias veces, también equivocados por unos mojones similares que pertenece a la Diputación.

Regresamos a una carretera fantasmal, donde son testigos de los estragos de la nueva autovía dos gasolineras abandonas. En cuanto la vía lo permite retornamos al camino de tierra y dejamos la carretera nacional.

Ahora ascendemos más notoriamente sin abandonar el mismo paisaje de arbustos y escaso arbolado. Varias veces más perdemos la ruta y tenemos que volver para encontrar el cruce donde nos perdimos. 

A la altura de Aljucén encontramos de nuevo la carretera y comenzamos un rápido descenso. En ese momento se generan dos opciones: seguir por el camino o llegar a Mérida por la carretera de forma más cómoda y rápida. Nos decidimos por la primera opción y tomamos el desvío hacia el embalse de Proserpina, de época romana. Es un lugar de esparcimiento para los ciudadanos de la capital extremeña, pero ese día con un tiempo no demasiado apacible estaba prácticamente vacío.

Recorremos el perímetro de la balsa de agua y encontramos un carril bici que asciende hasta un otero donde ya observamos la antigua Emerita Augusta. 

Entramos a la ciudad por el río y el parque del acueducto, buscando refugio porque el cielo comienza a amenazar. Cuando llegamos al hostal donde tenemos que hacer el chekin, comienza a llover copiosamente y nos tenemos que refugiar. Tras un largo proceso de inscripción, podemos acercarnos finalmente hasta el apartamento.

Apartamentos El Templo suit es un edificio de alquiler vacacional ubicado en el centro de Mérida, cerca del templo de Diana. Son apartamentos pequeños, funcionales, muy útiles para una breve estancia. Andábamos preocupados por dónde ubicar las bicicletas, pero nuestro apartamento contaba con una amplia terraza exterior donde pudimos incluso limpiarlas cómodamente. El resto del apartamento era quizás demasiado pequeño para el grupo de 5, ya que contaba con una cama de matrimonio, una litera, un sofá cama y otro sofá que no se extendía, pero pasamos el trago. Paco pudo dormir a pierna suelta después de haber compartido cama, que no sueño, con Salva la noche anterior.

Ideal para ir a dormir y el resto del día pasarlo fuera disfrutando de las maravillas de la ciudad.

Como ya habíamos visitado la ciudad un par de años antes, no hicimos el tour de las ruinas romanas y nos dedicamos a pasear por las transitadas calles del centro histórico, descansar en la Plaza España, frente al ayuntamiento y comprar algunas vituallas para el desayuno del día siguiente. Después comenzamos a buscar un lugar donde calmar nuestras hambrientos estómagos y al final hallamos un lugar.

En Las Delicias del Ibérico nos ofrecieron el menú del mediodía para cenar y cumplieron. Bastante oferta en los platos y buena ejecución. Dimos buena cuenta de todo debido más a nuestro famélico estado que a la calidad del producto, que tampoco desmerecía. El servicio fue bueno, e interesado en las vicisitudes del partido de Champions del Madrid. 

Buen lugar donde ingerir colesterol sin complejos.

Una vez finalizada la cena nos dirigimos al cercano apartamento para dar por finalizado el día y preparar el siguiente.